El puente de Vizcaya une las localidades de Portugalete y Getxo en la boca de la ría del Nervión. Fue diseñado por el arquitecto Alberto de Palacio, conocido también por obras como el palacio de cristal del Retiro y la estación de Atocha de Madrid, y construido en colaboración con el ingeniero francés Ferdinand Arnodin. Se inauguró en 1893 y fue el primer puente transbordador de estructura metálica del mundo. Las torres del puente se elevan hasta una altura de 61 m, el travesaño tiene 160 m de luz y está a 45 m de altura. Es un puente colgante dado que el travesaño o tablero está suspendido de cables que van de torre a torre y no unido a las torres de forma rígida. En 1937, las tropas republicanas volaron el tramo central del puente para inutilizarlo temporalmente dificultando así el avance nacional en el frente norte. Tras la guerra civil española, fue reconstruido con pequeñas modificaciones y puesto en funcionamiento en 1941.

No es un puente al uso, para evitar interferir en la navegación en la ría del Nervión hacia el puerto de Bilbao, tiene una barquilla transbordadora suspendida por cables del tablero que cruza de un extremo a otro en un minuto y medio. Los primeros años, la barquilla se movía mediante una caldera de vapor, desde 1901 se utilizan motores eléctricos. La barquilla ha sido sustituida hasta en cinco ocasiones a lo largo de la historia, la actual tiene capacidad para seis coches, varias motocicletas y doscientos pasajeros, y personalmente me parece bastante fea en relación al resto de la estructura. El transbordador funciona las 24 horas del día para dar servicio a los vecinos de ambas localidades. En 1999 se inauguró una pasarela panorámica a lo largo del tablero (a 45 m de altura), conectada por ascensores en ambos lados del puente, que permite cruzarlo caminando (no apto para personas con vértigo). Desde 2006 es patrimonio de la humanidad.

Los puentes transbordadores son poco comunes, se construyeron veinte en todo el mundo casi todos a principios del siglo XX, hoy se conservan ocho de ellos repartidos entre España, Francia, Alemania, Reino Unido y Argentina, de los cuales cinco tienen servicio regular.

Seguir leyendo «Puente de Vizcaya»